No importa si te gusta el reggaetón, el blues o la cumbia latina.
En una de esas creas que el nombre de eso que da equilibrio a este increíble Universo es Alá, un Dios omnipresente, o la gran potencia de la Madre Naturaleza. También da igual.
Meditar no es ser zen, ni andar con delirios místicos. Meditar es alinearte con una fuerza interna que puede más de lo que tu razón concibe.
¿Cómo? Soltando
Cuando meditás hacés foco en una única cosa y eso es todo que sucede en tu vida durante 20, 30 minutos. Al principio, quizás solo… 60 segundos.
Se trata de soltar todo lo que te hace bien y mal, te causa angustia o placer. Absolutamente todo.
Es muy recomendable que tu enfoque sea en el fluir de tu respiración.
No te frustres si al principio no sucede eso de la concentración. Ubicar tu atención en que no sale, también te va a sacar de tu objetivo.
Respirá y observá eso. Van a surgir pensamientos porque tu mente está muy acostumbrada a emitir alguno que otro de vez en cuando, a veces 5 a la vez, depende el nivel de intensidad de cada uno 😀
Y si no son pensamientos, son sensaciones, pero no importa… esos solo son mecanismos de subsistencia que te fuiste creando para sortear ciertos obstáculos que suelen aparecerse en tu vida. ¡Pueden ser muy útiles! Sin embargo, es importante que logres abandonarlos cuando VOS te lo propongas. Justamente, de eso se trata meditar.
Si entonces aparece una gran preocupación, aceptala. Observala y volvé a mirar tu respiración. Si viene una gran alegria, un recuerdo lindo… en este momento TAMBIÉN es distracción. Aceptalo, observalo y dejalo ir.
Menos que menos: no te pierdas en cuestiones pasadas o futuras. Ni siquiera del corto plazo. Nada. No hay excusas que valgan porque ya sos consciente del poco sentido que tiene eso ahora.
Ahora estás sanando. Y no lo dudes: estás resolviendo mucho, justamente sin tensiones ni stress. Porque así podés llegar más lejos, por más que a tu lógica le cueste asumirlo.
El Ser es lo Más
De esta manera, cualquiera sea el dolor físico, espiritual, mental o emocional que estés atravesando, cuando meditás te conectás con ese Ser que REALMENTE sos vos y es inmutable. Nada le pasa, o lo corrompe. Siempre esta en Paz.
Vos fijate si alinearte con esa frecuencia no te va a brindar los mejores frutos …
Cuándo Medito y Cuándo los Frutos
Bueno. Primero bajá un cambio con esa actitud de ciudadano.
Por un lado, lo lindo de esto es que es una experiencia personal y por eso nadie va a poder transmitirte con certeza el cuándo.
Lo que sí vale tener en cuenta es que ahora el soltar vuelve a protagonizar en esto de la meditación, por que si renunciás a la ansiedad de disponer de sus frutos cuanto antes sea posible, antes vas a disfrutarlos.
Sólo tenés que ser paciente con tus propios tiempos.
Por otro lado, para sentir los resultados de esta práctica, es recomendable hacerla a diario, quizás en las mañanas o las noches antes de dormir… o ¿porqué no? en ambas ocasiones. En ese caso, ya serías el Messi de los principiantes, lo cual tampoco está nada mal para empezar.
Espiralista te Invita…
Creo que, para incentivarte, te va a ser muy útil sumarte a esta cadena de meditación que se practica durante 40 días, en la cual ya se agregó mucha gente. Y ¿sabés qué? Cuando hay varias almas unidas por una misma causa- ufff no te das una idea del gran poder que movilizan !!
En esta grabación se repite un mantra a lo largo de siete minutos, que habla de soltar, rendirse al Amor para así poder sanar.
Si después de que termine el soundtrack, te copás con seguir al menos 10 minutos más en concentrarte en el fluir de tu respiración, mucho mejor !
Mucha suerte, cualquier cosa falamos !!